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A LOS CUATRO VIENTOS
Dave Boling 
Título original:
Editorial: Suma de letras
Año publicación: 2008
Temas: Literatura : Histórica
Título original:
Editorial: Suma de letras
Año publicación: 2008
Temas: Literatura : Histórica
A los cuatro vientos de Dave Boling:
El árbol junto a la casa de Juntas de Guernica, el célebre cuadro de Picasso La muerte de Guernica y el caserío Errotaberri, cerca del monte Oiz (Vizcaya), sobrevivieron al bombardeo y a la destrucción de dicho pueblo el 26 de abril de 1937, convirtiéndose de este modo en símbolos de la Guerra Civil española y la intervención alemana.La familia Ansotegui –el abuelo Pascual y la abuela Angeles, con sus tres hijos Justo, Josep y Xabier y su nieta Miren–, sin ser culpables de nada, cargarán con la responsabilidad del bombardeo sin poder olvidar jamás lo ocurrido. Desde 1893 hasta 1940, el hermano mayor, Justo, se hará cargo del caserío, como era tradición en aquella época, y mantendrá vivo el espíritu de su hogar conviviendo con su mujer, su nieta, amistades del pueblo,...siempre defendiendo la cultura vasca.Los edificios, paseos, mercados,... todos destruidos, serán reconstruidos, pero las personas muertas no podrán ser nunca remplazadas... Algunas cosas resistirán, como el árbol y Errotaberri, mientras que Franco ya no podrá ver bailar ni sonreír a los nietos de Ansotegui.
La historia mas real y la ficcion mas asombrosa se entremezclan en este sobervio cuadro literario en el que se nos desvela la imagen de un pueblo fuerte y orgulloso donde la tierra y el amor se unen en la lucha por la identidad.
El árbol junto a la casa de Juntas de Guernica, el célebre cuadro de Picasso La muerte de Guernica y el caserío Errotaberri, cerca del monte Oiz (Vizcaya), sobrevivieron al bombardeo y a la destrucción de dicho pueblo el 26 de abril de 1937, convirtiéndose de este modo en símbolos de la Guerra Civil española y la intervención alemana.La familia Ansotegui –el abuelo Pascual y la abuela Angeles, con sus tres hijos Justo, Josep y Xabier y su nieta Miren–, sin ser culpables de nada, cargarán con la responsabilidad del bombardeo sin poder olvidar jamás lo ocurrido. Desde 1893 hasta 1940, el hermano mayor, Justo, se hará cargo del caserío, como era tradición en aquella época, y mantendrá vivo el espíritu de su hogar conviviendo con su mujer, su nieta, amistades del pueblo,...siempre defendiendo la cultura vasca.Los edificios, paseos, mercados,... todos destruidos, serán reconstruidos, pero las personas muertas no podrán ser nunca remplazadas... Algunas cosas resistirán, como el árbol y Errotaberri, mientras que Franco ya no podrá ver bailar ni sonreír a los nietos de Ansotegui.
La historia mas real y la ficcion mas asombrosa se entremezclan en este sobervio cuadro literario en el que se nos desvela la imagen de un pueblo fuerte y orgulloso donde la tierra y el amor se unen en la lucha por la identidad.
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